CONAF anunció la aplicacion de nuevos protocolos para áreas protegidas y aumento de personal de resguardo
Ante la Comisión Investigadora, ejecutivos del organismo reconocieron que a noviembre del año pasado existían diversas falencias que, conjuntamente con las características físicas y meteorológicas, facilitaron la rápida propagación del incendio de Torres del Paine.
Un aumento del personal de resguardo y la aplicación de nuevos protocolos preventivos y de control de incendios en áreas protegidas anunciaron altos ejecutivos de la Conaf ante la Comisión de Recursos Naturales de la Cámara de Diputados, convertida en investigadora sobre las causas que han originado diversos incendios en el país.
Los ejecutivos reconocieron que, con los recursos presupuestarios y humanos disponibles hacia noviembre de 2011, era difícil contar con guarderías nocturnas en los puntos de accesos de las 100 áreas silvestres protegidas en Chile, así como en las diversas zonas de los mismos. Acotaron que, a lo más, se podía aspirar a un movimiento de personal entre parques.
Explicaron que se trabajó durante todo el verano para generar planes de acción que serán implementados a partir de la primavera de este año y que tienen como finalidad cuidar mejor los parques chilenos.
Indicaron que, específicamente en las Torres del Paine, se va a cuidar más la zona de montaña; se utilizarán nuevos protocolos que darán cuenta, por ejemplo, del movimiento de los turistas; y se implementará una adecuada vigilancia de guardaparques para prevenir los campamentos ilegales.
Además, adelantaron, se tiene la aprobación de la Dirección de Presupuesto para aumentar la dotación de personal y las horas extras de los trabajadores en todos los parques, partiendo en 31 de los más complejos.
Frente a consultas específicas de la diputada Carolina Goic (DC) y del diputado Patricio Vallespín (DC), los ejecutivos señalaron que la autorización transitoria de navegación, por quince meses, por el lago Nordenskjöld, fue efectuada por el director ejecutivo de la Conaf en razón de la necesidad de disminuir la afluencia de turistas en la zona quemada, evitar la nueva ocurrencia de daños en el lugar, propiciar su recuperación y tratar de que no se afectara la calidad turística del parque.
Los representantes de la Conaf fueron enfáticos en señalar que no habían recursos suficientes para haber controlado el incendio de las Torres del Paine en el lugar y a la hora en que ocurrió, recordando que el parque tiene sobre las 250 mil hectáreas y que el incendio ocurrió en un sector absolutamente aislado del área cordillerana.
Acotaron que una de las metas a cumplir y que sería un gran logro en el mediano plazo es reducir la ocurrencia de incendios de tres a uno por año y de siniestros mayores a uno cada cincuenta años. “Para eso se necesita más recursos, un mejor sistema de control de incendio, pero los guías son fundamentales, tienen que ser aliados nuestros, si los guías locales hubiesen estado mejor capacitados y más involucrados lo más probable es que se hubiese podido apagar el incendio en las primeras horas y esa es la estrategia que estamos buscando”, comentaron.
La presidenta de la Comisión, diputada Andrea Molina (UDI) destacó que en la sesión también se pudo despejar una duda en torno al crédito BID rechazado por la Conaf. Dijo que, si bien es cierto que la Conaf tiene un déficit en términos de financiamiento, en su capacidad de respuesta y en la infraestructura, no estuvo dado por el hecho que no se tomara el crédito del BID.
En esta materia, los ejecutivos explicaron que el crédito, gestionado en 2007, fue desechado por tres razones principales: un alto costo financiero para el país; el hecho que gran parte de los objetivos diseñados ya estaban cumplidos (3.2 millones de dólares ya invertidos, de un total de 5 millones de dólares); y el compromiso expreso de Hacienda de cubrir con recursos fiscales el resto del programa.
La diputada Molina estimó que uno de los problemas detectados en el siniestro del parque no está en el control del incendio ya declarado, en donde se pudo apreciar gran disposición para enfrentarlo, sino que en las horas previas e inmediatamente después de iniciado el foco.
“El tema está en cómo se cubre en el minuto cero. Cuántos brigadistas hay en la zona; si trabajan en conjunto con los guías; si los turistas se saben donde están… lo que queremos es prevenir que esto ocurra y que no se tenga que esperar al tercer día para apagarlos”, reflexionó.
Fonte: Luis Antonio Tovar Narvaez / camara.cl
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